Lo que el cliente recuerda no es la metodología. Es lo que sintió al vivirla.
Las estructuras sirven. Pero lo inolvidable es la experiencia emocional y simbólica que creaste.
Si tu servicio se siente, permanece. Si solo se explica, se olvida.
Textos de promoción para redefinir el trabajo y recuperar el sentido en la era de las máquinas
Lo que el cliente recuerda no es la metodología. Es lo que sintió al vivirla.
Las estructuras sirven. Pero lo inolvidable es la experiencia emocional y simbólica que creaste.
Si tu servicio se siente, permanece. Si solo se explica, se olvida.