Ya no basta con producir.
El nuevo trabajo no se mide por lo que haces,
sino por lo que activas en los demás, en el entorno, en la red de sentido.
Un gesto puede tener más impacto que una jornada completa.
Una conversación, más alcance que un currículum.
El trabajo posthumanista no busca eficiencia,
sino resonancia.
Eso exige una nueva conciencia:
cada acto deja huella, y no solo en el balance final.
El nuevo trabajo no se mide por lo que haces,
sino por lo que activas en los demás, en el entorno, en la red de sentido.
Un gesto puede tener más impacto que una jornada completa.
Una conversación, más alcance que un currículum.
El trabajo posthumanista no busca eficiencia,
sino resonancia.
Eso exige una nueva conciencia:
cada acto deja huella, y no solo en el balance final.