Marketing Digital Posthumanista nace como respuesta a esta pregunta. Este no es un blog de herramientas ni de tácticas para captar atención. Es un espacio para comprender cómo comunicar valor en una época en la que el trabajo se transforma y los mensajes ya no pueden ser vacíos. Aquí exploramos una nueva ética del comunicar: basada en la energía cognitiva, en el impacto significativo, y en la necesidad urgente de alinear lo que hacemos con lo que somos. Este blog es para quienes quieren dejar de repetir fórmulas y empezar a generar sentido.

Casos aplicados

En la sección de 'Casos aplicados' reunimos ejemplos reales y adaptados de cómo puede expresarse y promocionarse un profesional en la era del marketing posthumanista. Aquí no buscamos fórmulas, sino coherencia. No se trata de decir más, sino de decirlo mejor. Cada caso es una invitación a alinear la comunicación externa con el propósito interno, y a cultivar vínculos auténticos más allá del impacto.

De AIDA a la sabiduría narrativa: un cambio de paradigma en la comunicación

Durante décadas, el modelo AIDA —Atención, Interés, Deseo, Acción— fue el esquema dominante en la comunicación publicitaria. Su lógica es clara: atraer, mantener, persuadir y conducir al consumidor hacia la compra. Es un modelo eficaz para la venta directa, pero hoy se percibe limitado frente a los nuevos horizontes de la comunicación digital y posthumanista.

Frente a esta visión transaccional, emerge otra trilogía más profunda: interesar, seducir y emocionar. Aquí el objetivo no es empujar al consumidor a la acción inmediata, sino construir experiencias con huella emocional y relacional.

Interesar vs Atención/Interés

  • AIDA se centra en captar la atención con estímulos externos y despertar curiosidad.

  • Interesar en la narrativa posthumanista significa conectar con inquietudes vitales, abrir preguntas, ofrecer sentido. No basta con que miren, es necesario que sientan relevancia.

Seducir vs Deseo

  • AIDA entiende el deseo como impulso de consumo: querer el producto.

  • Seducir en cambio significa mantener un magnetismo narrativo que invita a permanecer. La seducción narrativa no promete posesión inmediata, sino vínculo duradero.

Emocionar vs Acción

  • AIDA culmina en la acción: clic, compra, conversión.

  • Emocionar va más allá: busca dejar huella en la memoria. La acción puede ocurrir, pero como consecuencia natural de haber sentido algo auténtico.

Un nuevo enfoque de comunicación

El contraste es revelador:

  • AIDA es transaccional: vender.

  • La trilogía narrativa es relacional: construir comunidad y pertenencia.

En un mundo saturado de estímulos y algoritmos, donde la atención se fragmenta en segundos, el marketing posthumanista necesita dejar de perseguir conversiones inmediatas y empezar a sembrar memorias. Porque el clic caduca, pero la emoción permanece.